Cheng-Zong Yu
Taiwan
the Cyberflâneur in Taiwan
En Taiwán, el uso diario de Internet supera las 6 horas de media y consume casi 34 GB de datos. Cheng-Zong utiliza estos datos en proyectos artísticos, explorando atuendos visuales basados en las aplicaciones LINE, Google Maps y Midjourney. Estas imágenes inspiran estampados que incorporan flujos de datos y se convierten en arte para llevar puesto.
El reciente crecimiento del Net art, la tecnología, el big data y las NFT ha ampliado el alcance del arte digital. El collage digital y la manipulación de software ocupan un lugar central en el arte contemporáneo. Inspirándose en Kazuki Umezawa, Faig Ahmed y Lev Manovich, estas obras captan la esencia de los artistas en lugar de replicar su estilo, transformando el proceso de creación.
Cheng-Zong busca materiales de la vida cotidiana por dos razones: la conexión con su educación y la cultura taiwanesa, y el deseo de apoyar la conservación del medio ambiente. Utilizando materiales cotidianos como hilos metálicos desechados y cintas sobrantes, los transforma mediante impresión y tejido. Este proceso teje «Hilos de datos» en patrones, creando una pieza que tiende un puente entre la vida real y el mundo virtual.
En Taiwán, el uso diario de Internet supera las 6 horas de media y consume casi 34 GB de datos. Cheng-Zong utiliza estos datos en proyectos artísticos, explorando atuendos visuales basados en las aplicaciones LINE, Google Maps y Midjourney. Estas imágenes inspiran estampados que incorporan flujos de datos y se convierten en arte para llevar puesto.
El reciente crecimiento del Net art, la tecnología, el big data y las NFT ha ampliado el alcance del arte digital. El collage digital y la manipulación de software ocupan un lugar central en el arte contemporáneo. Inspirándose en Kazuki Umezawa, Faig Ahmed y Lev Manovich, estas obras captan la esencia de los artistas en lugar de replicar su estilo, transformando el proceso de creación.
Cheng-Zong busca materiales de la vida cotidiana por dos razones: la conexión con su educación y la cultura taiwanesa, y el deseo de apoyar la conservación del medio ambiente. Utilizando materiales cotidianos como hilos metálicos desechados y cintas sobrantes, los transforma mediante impresión y tejido. Este proceso teje «Hilos de datos» en patrones, creando una pieza que tiende un puente entre la vida real y el mundo virtual.