enero 16, 2018
Skunkfunk sigue apostando firmemente por la sostenibilidad
Con motivo de la publicación del informe de sostenibilidad de la empresa vasca, entrevistamos a su fundador Mikel Feijoo.
Hace 20 años, Mikel Feijoo Elzo, fundador de Skunkunk, decidió hacer de la industria de la moda un modo de vida. Su visión fue apostar por el diseño y la creación como vías para lograr una industria diferente a la actual, una de las más contaminantes del planeta.
1. Mikel, desde tu perspectiva, ¿qué cambios están ocurriendo en la moda hoy en día?
Hay un cambio profundo en la forma en la que consumimos y en los actores involucrados en el proceso. Queremos todo, lo queremos ahora y solo queremos pagar una fracción del precio. La ropa ha perdido su valor como el artículo de lujo que solía ser. Hemos llegado a un punto en el que las cadenas minoristas y las corporaciones de logística dominan la industria de la moda.
La noción de la creación como un activo valioso y la moda como arte usable ha sido socavada. En Skunkfunk defendemos el diseño, hacemos slow fashion porque creemos en lo que está hecho desde cero. Existen muchas marcas y la mayoría de ellas limitan sus esfuerzos para fabricar ecos o copiar sin tapujos las tendencias de los demás.
Por otro lado, aparecieron nuevos canales de venta que refuerzan el factor de inmediatez, creando un consumidor exacerbado. El año pasado se produjeron 85,000 millones de prendas en el mundo. Eso no es sostenible en absoluto! ¿Cuántas de esas prendas no se van a usar? Creo que vamos por el camino equivocado, no hay suficientes recursos para hacer frente a esto, es simple matemática.
2. ¿Cuál es el problema que más te preocupa?
Las condiciones de trabajo son deplorables en muchos lugares, pero cambiar esta situación es más fácil que revertir el perjuicio medioambiental que todos causamos en nuestro entorno, el único que tenemos … La información está ahí y ahora todos deberíamos considerar que nuestro dinero tiene mayor poder que nuestro voto. Con él podemos generar un mayor impacto en el mundo que con nuestro sufragio.
3. ¿Tiene alguna cifra con respecto a la producción de ropa orgánica o reciclada? ¿O sobre las empresas que trabajan con buenas prácticas?
Hay muchas marcas en todo el mundo, pero a escala corporativa son solo algunas. Los grandes emplean su departamento de responsabilidad social y sostenibilidad para lavarse las manos, para cubrir el lado oscuro. Algunos de ellos han creado marcas para hacer una línea sostenible cuando la mayoría de sus prácticas comerciales son completamente opuestas. Buscan el beneficio inmediato, la imagen, la fachada. En cuanto a las cifras (en el caso de España) sugiero que echen un vistazo a Slow Fashion Next y su índice.
4. ¿Qué está encendiendo el cambio?
Existen muchas asociaciones, ONG y empresas de certificación, pero el verdadero cambio debería provenir de las empresas dedicadas al diseño, la producción y la comercialización. Un gran ejemplo de buenas prácticas es Patagonia. Entonces tenemos que enfrentar la escasez de proveedores textiles. Crear moda es complejo en ese entorno.
Sin embargo, el mayor cambio ocurrirá cuando los consumidores cambien sus hábitos y compren menos, pero mejor, pensar a quién le están dando negocios.
5. ¿Qué ofrece Skunkfunk que difiere de los demás?
Nuestros diseños se hacen en la casa y tienen personalidad. Ofrecemos trazabilidad a través de los procesos de certificación. Somos la única empresa de moda certificada GOT en España, y también somos la única marca de moda certificada Fairtrade®. Ofrecemos una comunicación transparente, aunque sabemos que siempre hay espacio para mejorar, nos gustaría compartir más, hacer más y mucho mejor. Seguimos trabajando en eso. Para SS18 alcanzamos el 92% de las prendas sostenibles dentro de la colección, y también participamos en proyectos innovadores como Chetna Organic, chetnaorganic.org.in, y cooperamos con Koopera, koopera.org, para dar una segunda vida a las prendas no vendibles. y accesorios.