Su colección se basa en la exploración de su infancia: “Mis padres me llevaban a los templos cuando era pequeño. Para ser sincero, no lo disfrutaba mucho, pero la colorida decoración del templo y el humo que me rodeaba aún permanecen muy nítidos en mi memoria”.
“Después de mudarme a Japón, mis padres se divorciaron. Por eso, los recuerdos que pasamos juntos en el templo se convirtieron en algo muy valioso para mí. También siento lástima de que muchas culturas chinas estén desapareciendo, por eso elegí este tema para que más gente las conozca”.
Utilizó pelo de caballo para expresar el fluir del incienso, que es transparente y suave pero puede mantener su forma por sí mismo. También utilizó telas de kimono de segunda mano para que mi colección tuviera más significado.